Al Zawahiri: Ben Laden está vivo. Por Miguel A. Jaimes N.
Martes, 27/03/2012 02:16 PM
Lamentablemente, debo decirles que el número uno de Al-Qaeda es el médico egipcio Ayman Al Zawahiri, quien acaba de asegurar en un vídeo que ha emitido la cadena Al Yazira que Osama Bin Laden sigue vivo. Seguramente, esto pueda ser cierto, pues Laden era un peso muy fuerte al cual no les sería tan fácilmente eliminar, y hoy estaría protegido en alguna de las fortalezas que tienen preparadas en el mundo quienes lo formaron: los EE.UU.
Al Zawahiri no ha dudado en afirmar: “Al Qaeda sigue siendo, gracias a Dios, una base para la guerra santa. Su príncipe, el jeque Osama Bin Laden, que Dios le proteja, dirige aún la guerra santa. Traigo este mensaje de alegría a todos los musulmanes y muyahidines de Al-Qaeda que, gracias a Dios, se extiende, se amplía y se refuerza”.
Esta declaración provino desde la cadena televisiva al-Jazera financiada desde la petromonarquía de Catar. Así, el lugarteniente de Osama Bin Laden desmiente las declaraciones del presidente de Estados Unidos, Obama, sobre que la red terrorista se está acabando.
Bajo el mando de Zawahiri, Al-Qaeda encuentra los nuevos muyahidines musulmanes, sobre todo con los que provienen del financiamiento de la Casa de los Saud en Arabia Saudita.
Su nueva estrategia consiste en presionar a Irán y Siria tal y como acaban de conseguirlo en Libia, donde el llamamiento a estos grupos insurgentes es que ataquen las instalaciones petrolíferas en los países árabes.
La revista estadounidense Vanity Fair, tituló “Conozco a Osama Bin Laden: Una Historia oral», varios entrevistados aseguran que Bin Laden ha jurado que nunca será tomado por las fuerzas enemigas con vida, y que en una ocasión hizo entrega de una pistola cargada con dos balas a su guardaespaldas para que en el caso de que fuera a ser detenido, estos le dispararan.
Lo que este puñado de terroristas amparados y formados por la CIA, junto al M-15 y M-16 británicos es un mundo tutelado bajo sus terroristas armas. Financiados con dineros del narcotráfico y con gritos de guerra tan barbaros como el anunciado y practicados en Libia, donde a quien señalen de gadafista inmediatamente gritan: degollad, después de esto le arrancarán un ojo.