Julián, Manning y Joaquín. Por Miguel A. Jaimes N.
Viernes, 29/04/2011 01:55 PM
Wikileaks, un soldado y Anncol
Julián Assange es australiano y de profesión periodista. Fundador y dueño de la famosa página web: Wikileaks. Actualmente, acusado de terrorista por la Corte de Belmarsh, Reino Unido. Seleccionaron esta ciudad por encontrarse una conocida prisión de máxima seguridad, así, el escarmiento será más duro.
En una acción revolucionaria, mostró al mundo 251.000 cables de las conspiraciones del Departamento de Estado norteamericano, contra cientos de países. Un infame video donde un helicóptero apache ametralla a 18 civiles, entre esos a 2 periodistas de Reuters, todo en una calle de Bagdad el 12 de julio de 2007.
Publicó un informe oficial donde se relata un ataque aéreo de EE.UU contra la aldea Granai, Afganistán, murieron 140 civiles, mujeres y una gran cantidad de niños.
Notició 92.000 documentos militares relacionados con Afganistán y Paquistán, más 392.000 documentos de la guerra de Irak, todos referidos a torturas y muertes de iraquíes y afganos en las manos de la ocupación estadounidense y de sus aliados, la OTAN.
Suecia lo reclama por enfrentar cargos de acoso sexual contra dos mujeres en agosto pasado, después se descubrió que son prostitutas.
Las publicaciones de Wikileaks, parecían más bien, obra de un equipo multidisciplinario, puestos de acuerdo para dar a conocer los abusos confeccionados por el imperialismo: EE.UU – Europa.
Pero todo fue labor de un solitario muchacho, Bradley Manning de 23 años de edad, soldado de Primera Clase del ejército de los EE.UU Oriundo de Crescent, Oklahoma, hoy, encarcelado en Quantico, Virginia, en una prisión del Cuerpo de Marines.
Es el quinto estadounidense acusado bajo la antigua ley de espionaje, promulgada en 1917.
Manning y 25.000 estadounidenses más, están bajo el tenebroso sistema del AISLAMIENTO CARCELARIO PROLONGADO. Los martirios sufridos han sido tan crueles que el Relator Especial sobre Torturas de la ONU, anunció una decisión prudente: abrir una investigación.
Furiosamente atormentado, negada hasta las visitas de su madre, es una pobre víctima de los halcones de la Casa Blanca
La guerra de cuarta generación, o más aun, las operaciones asimétricas y las hostilidades noticiosas, siguen dando bajas. La futura verdad de los conflictos mundiales se debatirá en conflagraciones por la información.
Bien lo expresó el Coronel Libio Muamar Al Gadafi en su sabio, Libro Verde: Quien tiene la información, controla el poder.
Acá, desde Venezuela, hace cuestión de horas, junto al mundo, empezábamos a aprendernos el nombre de Joaquín Pérez Becerra, nacido en Colombia, fue alcalde y uno de los pocos sobreviviente de la Unión Patriótica, quienes vieron perplejos y sin poder defenderse, como asesinaban a más de 3000 de sus militantes, fue exiliado en Suecia y asumió su nacionalidad desde hace más de 20 años.
En varias oportunidades visito nuestro país, pero este 23 de abril en plena Semana Santa, llego nuevamente, aun nadie ha revelado quien lo invito y con quienes se vería.
Siempre cumplió con su deber rebelde, informar en sus trabajos periodísticos las verdades de esta revolución. Por estas razones visitaba siempre nuestro país.
Pero extrañamente en un abrir y cerrar de ojos fue encarcelado e incomunicado, igual que al soldado Bradley Manning. Y sin explicar nada a nadie en una operación secreta, fue exhibido a su llegada en una pista miliar de Bogotá.
Hemos sabido más de Joaquín por lo que ha informado el Presidente Juan Manuel Santos y las autoridades del neogranadino país, que por lo que hayan podido informar hasta ahora el Comandante Presidente Hugo Chávez o algunos de sus ministros.
Nos hemos enterado más de este periodista en los noticieros de Radio Caracol, Diario El Espectador y el canal RCN que por los medios de comunicación de esta revolución bolivariana.
Hemos sabido del pronunciamiento oficial del gobierno de Suecia, exigiendo inmediatas explicaciones al gobierno venezolano que por lo que haya podido informar nuestro Ministro del Poder Popular para las Relaciones Exteriores en este lio diplomático.
Las revelaciones de la cadena Anncol referidos a las fosas comunes de las múltiples masacres de La Macarena dejaron perplejo al mundo. Solo en una fosa fueron desenterrados más de 2000 cuerpos que a pesar de su estado de descomposición, podían vérseles las marcas de torturas y múltiples balazos en sus inocentes cuerpos.
El gobierno del colombiano Juan Manuel Santos le cobra a Joaquín Pérez Becerra, las denuncias que éste mostro al mundo con el pasado gobierno de Álvaro Uribe y de su ministro estrella, que solo es santo en su apellido.
Julián, Manning y Joaquín, son los sobrevivientes de esta caverna llamada mundo, donde imponen códigos rojos desde una carroña titulada: Interpol. Encarcelados los tres, solo por denunciar.
Desde esta revolución, nuestro Comandante Presidente Hugo Chávez, igual ha denunciado en cualquier escenario mundial la injusta encarcelación de los “Cinco Héroes Cubanos”.
En el caso de Joaquín Pérez Becerra, esperaremos con paciencia hasta el día en que el Comandante Presidente Hugo Chávez, le explique al mundo, cuáles fueron las causas de su decisión.
