Mujeres del Sol. Por Miguel A. Jaimes N.
Miércoles, 09/05/2012 06:32 PM
Las mundialmente famosas Madres de la Plaza de Mayo en la República Argentina, quienes cada miércoles marchaban alrededor de aquella derruida plaza de la impunidad.
Mas las cientos de progenitoras que se enteraron en una noticia desarrapada, infame, lúgubre que su hijo había muerto en un cerro que ni ellas aún han llegado a pisar menos a conocer.
El Cerro Bachiller, Cantaura, Yumare y tantos otros asesinatos cometidos por los mal llamados cuerpos de seguridad de un Estado violador de la paz interna de una nación que se acostumbró a morir con unos inefables dirigentes de AD y Copei.
Tantos abusos que por dolor no me atrevería a seguir recordando por consideración cercana al comercial Día de la Madre y porque nuestras viejas creen todavía con un halo de esperanza.
Mujeres que han tenido que enfrentar a las cobardes traiciones de los días y de las horas. Es mejor ser mujer que dama. Mejor andar con una escoba de paja barriendo calles y limpiando pisos en las madrugadas de las dolorosas emergencias de hospitales. Frunciendo un deshilachado coleto remojado con kerosene en los grandes y amplios pisos de antiguos liceos.
Recordar a nuestras abuelas por el duro trajinar que les tocó vivir, inundadas de muchachos, ilusiones y mentiras.
Ahora se presenta la reconstrucción de un sueño. Los abuelos hablan que lo vivido hasta ahora con Chávez nunca lo habían vivido. Todos los logros, servicios, Misiones, ayudas, becas y pensiones jamás tenían presente que eso llegara a suceder tan pronto.
Cuando observe la lista de mas de doce mil viejos y viejas que beneficiarían con su inclusión al Instituto de los Seguros Sociales sentí la gran cantidad de bendiciones, cariño y amor de quienes ayer sólo tuvieron por vida dolor y hoy lo tienen todo, aún falta, pero tienen de todo.
Por eso Chávez tiene bendiciones y buena voluntad de un país que ayer sufrió la tragedia de quienes malgastaron las enormes ganancias petroleras. Hoy, todo al servicio de ancianos y ancianas, de niños y niñas, de todos y todas.
Chávez siéntete bendecido por las sagradas mujeres del sol…