Silencio que el Gobierno duerme. Por Miguel A. Jaimes N.
Miércoles, 07/08/2013 08:51 AM
La prolongada situación del desabastecimiento ha regresado y va rumbo a convertirse en una crisis originada, recreada y mantenida por quienes no quieren sostener definitivamente los sartenes por sus mangos.
Ante esto los medios de comunicación privada hacen su comidilla y en vez de salirles al paso por parte del alto gobierno más bien lo perfilan hacia una verdadera crisis nacional.
Mientras muchos seguimos sintiendo que aquí existe es el gobierno de Caracas, donde en la ciudad capital nunca falta nada, me imagino que muchos funcionarios y organismos se encargan que el ruido no llegue hasta el Palacio de Miraflores pues ardería Troya.
Mientras a nadie en el alto gobierno se le ha ocurrido montar el mapa del fulano desabastecimiento. Pues si esto se hiciera quedaría al descubierto lo que verdaderamente aquí existe lo cual es un saboteo en el cual tratan de crear zonas sensibles en algunos estados.
Mientras, esto en el país es aprovechado por la oposición y ni en el CICPC se atreven a conformar una brigada que investigue el desabastecimiento, acaparamiento, sobre facturación y remarcaje de precios.
En la situación de los vehículos hay declaraciones en las que uno no sabe si el tonto es el gobierno o uno mismo es quien interpreta muy bien ese papel. Acaso en el alto gobierno no saben que los concesionarios de vehículos cobran comisiones superiores en algunos casos por encima del 200% del precio real del vehículo.
Con la nueva propuesta de ley que aún no sale se prohibirá a las notarías aceptar la venta de un vehículo por encima de su precio normal. Pero desde hace tiempo la comisión se trabaja por debajo de la mesa. Quien va a dejar de comprar o de vender un vehículo por encima de su precio, nadie, ya están cobrando por adelantado y sin ningún tipo de recibo lo correspondiente al sobre precio.
Pero todos nos preguntamos donde están los organismos de inteligencia como el SEBIN, DIM, CICPC y demás derivados, estas acciones ilegales a todas luces las hacen abierta y descaradamente en los concesionarios, pero nadie en el alto gobierno parece percatarse. En las mismas casas de los dueños de estas concesionarios tienen ocultos vehículos en cantidades, por favor no hay que ser policía para saberlo.
Dejen de dormir, despertemos el silencio…
