Con esta oposición no hay de que preocuparse. Por Miguel A. Jaimes N.
Martes, 30/04/2013 10:31 PM
Debo confesar que caía en el terreno de lo ilustrado, cosa de la cual somos acusados los que intentamos escribir. Por eso los insultos vienen en altos tonos: académicuchos, intelectualoides, ustedes los profesores, ―quienes nos atrevernos a esto― en definitiva somos blanco de ataques por parte de opositores y también llevamos un poco más de los nuestros.
Todo se me enredaba cuando trataba de escribir circunspecto un artículo de lo cual no vale la pena ni hablar: la oposición.
Pero decidí irme por las cosas fáciles, me fui por lo cómodo, algo me alumbró y le di al ratón hacia los sinónimos, pero sin llegar hasta los antónimos, eso me haría concurrir en la exageración.
Allí encontré que oposición es igual a obstáculos, impedimentos, trabas, barreras, pero también a estorbos, dificultades, obstrucciones y hasta algo de embarazo, pero no de bebes, sino de ignorancia.
También reflexione y tan rápido como una tortuga me vino a la mente que con esta gente no vale la pena ponerse inteligente. Por esas cosas el candidato opositor nos hizo creer que de verdad era muy bravo, pero no resultó como tal.
Así que para no pecar de inocentones, todos nos preguntamos si de verdad Capriles es tan “arrecho” como se le ve. Pero hemos sufrido una destellante desilusión, él es un disfraz de Emú.
Pero la cosa no es nada fácil, mientras vamos escuchamos al resto de intrigantes en su arrastre de letanías, trampas, reclamos, deudas y soportes falsificados, ninguno trata de ponerse de acuerdo, esto es como un centro de estudiantes recién ganado.
Por ejemplo, para ser ministro de interior y justicia no debe ser nada difícil, ―hasta yo podría― es más espinoso controlar el hampa ―hay si no podría― que a la oposición, pues los que tenemos dan mucho de qué hablar y son unos conspiradores de comiquita.
Pero, “hay un camino” debemos adoptar a la oposición. Hay que decirles que son nuestros. Que son demasiado malos como conspiradores.
A estas alturas en caída de este escrito traten de seguir leyéndolo. Yo recordaba cuando era niño y fastidioso, mi prima la novelera nos sentaba en silencio y nos pedia poner mucha atención al televisor, allí por primera vez vi a alguien concentrado a la cual se le podía caer el mundo y ni se inmutaba, ¡wau que nivel! Los domingos en la noche eran bajo el control de ella y obligatoriamente teníamos que ver los betseller llamados Falcon Cres y Dinastía, ―yo visito un lugar de que se parece a estas series, pero no por millonarios, sino por los escándalos que a diario se ven― llegue a creer que aquello se trataba del estado Falcón por lo del nombre y después mansa confusión.
Pues los de la mud, ―en minúscula es mejor― ayer Coordinadora Democrática, más atrás el caudillo y antes el chiripero y un pelín más allá el gocho y el otro del Si con su pitico ¿lo recuerdan?. Hasta el de las vacas flacas y ya dejémoslo hasta allí, pues de seguro todos son la fantasía de la ecolalia: repetir, copiarse y chuletearse.
Son más escandalosos que las series de los domingos que mi prima la novelera me obligaba a ver ―de ahí me viene lo chismoso―. Por eso, esta oposición todo lo cuenta, hasta sus planes desestabilizadores. Aquí se sabía hasta en Tucupita, un poquito más allá de Pedernales, donde vivía el agente de la CIA que acaban de capturar en Caracas con más de 500 videos. Los estrategas conspiradores decían a todo cañote, vamos pa quel gringuito.
Por cierto que el General traidor, el del lunar, el intrépido, debe andar que echa chispas porque está en varias comprometedoras grabaciones, menos mal que el Sebin tiene una sede más moderna que su vecina la Torre Domus, pues lo llevaron allí de visita y debe estar bien cómodo, allí todo es nuevo y bonito.
Uy pero los izquierdistas antes teníamos hasta mala suerte, a los de ahora les va muy bien. Anteriormente esas sedes policiales eran horribles, hoy en día son una belleza, pero es mejor no ir ni de testigo, ustedes saben que todo ñangara es desconfiado.
Pero el General Rivero está preso porque se acostumbró a andar con la oposición y allí se aprende a hablar de más. Son el infortunio de lo que no deberían ser y mucho menos decir, pero no asimilan.
Aunque Caprichito si las agarró en el aire y está tratando de evitarse todo esto, escucho muy bien cuando el Presidente Nicolás Maduro le advirtió: “vas a terminar como Carmona” ―yo pondría― y como Rosales. Con esto el Presidente en el fondo lo estima y le da un consejo, niño rico te están serruchando el puesto, los lobos quieren sacarte del medio y de cuajo. A muchacho pa bobo.
Pero todo esto pasa por la cantidad de horas inservibles que les dan en Globovisión, los convierten en gafos inútiles funcionales. Yo de opositor no me dejo entrevistar por el pelón “Del radar de los barrios”, menos por el pavoso de “Alo Venezuela” y no sé qué cosa más, ese el salta talanqueras, si, el “Señor del maletín”, ¿lo recuerdan? El calvo, ese medio pelón de bigotico que tiene la maña de andar empujándose los entes, el que compite con los dólares de Richard Mardo, el de los jugueticos con los colombianos.
Me refiero al súper ladrón al que le encanta un guiso, quien embromó a muchos y pa mala suerte de los chavistas los próximos en saltar y voltearse se percataron que este pandillero se había robado hasta la talanquera.
Por eso es que los entrevistados de ese canal no tienen nada interesante a que referirse, no saben ni los kilómetros cuadrados de este país, todos en su afán protagonista se ponen a develar sus planes.
Por ejemplo, cada vez que intentan entrevistar a Ledezma las cosas se ponen feas, peores, este alcalde es poético, perdón peotico. Ahí es cuando todos nos enteramos de los últimos chismes de la mud. El burgomaestre llora, que aquel no lo deja, que porque me tienen rabia, que hecho yo, déjenme ser presidente, no me perdonan no haber pedido consulta en la Misión Milagro y haber colaborado con el burguesito a quemar esas instalaciones médicas, ufff pero paremos de contar.
Miren, yo que ando desempleado le voy a dar un dato al siquiatra Jorge Rodríguez a ver si me contrata de asistonto y se deja de hacer política, estaría multimillonario, pero lamentablemente al poco tiempo él y yo terminaríamos en locos, porque eso de intentar y no poder enderezar a estos politiqueros de oposición es mayúsculo atrevimiento, ellos son el último chiste de este país.
Y con lo del CNE caprichito me tiene confundido un día pide auditoria, después solicita reconteo, ya hablo de fraude, ahora de nuevas elecciones, que los cuadernos, que la tinta no era indeleble, que las maquinas fallaron, que le corrieron sus testigos a punta de pistola, que no reconoce a maduro, pero que debe entregar el cargo de Presidente. Ay Dios mío que vaina nueva habrán metido al país y los policías no se han dado cuenta. Conchale que se andará metiendo Caprilillo.