Analistas cuestionan acercamiento diplomático de Estados Unidos hacia Venezuela
Por Sabina Di Muro
CARACAS, 16 Jun (Xinhua).- Las relaciones diplomáticas entre Venezuela y Estados Unidos “podrían restablecerse” luego del encuentro celebrado este martes entre la canciller Delcy Rodríguez y el secretario del Departamento de Estado de Estados Unidos (EEUU), John Kerry, en el marco de la 46º Asamblea General de la Organización de Estados Americanos (OEA).
En dicho encuentro surgió el planteamiento de iniciar un conjunto de reuniones de alto nivel que supondrían la distensión de las tensiones entre ambos países, que no cuentan con embajadores desde el 2008, y se distanciaron más desde que Barack Obama, en marzo de 2015, aprobó una Orden Ejecutiva en la que califica a Venezuela como una “amenaza inusual y extraordinaria” para su país.
“Hemos acordado mantener un diálogo inmediatamente que funcione para ella (Rodríguez), para mí y para Tomas Shannon, y sea en continuación de las conversaciones que él tuvo en Caracas”, afirmó Kerry al referirse al inminente viaje a la capital venezolana del consejero del Departamento de Estado de EEUU.
Hace exactamente un año, en junio de 2015, se produjo el último intento para restablecer las relaciones entre ambos países cuando se reunieron, en Haití, la canciller Delcy Rodríguez, el diputado del Partido Socialista Unido de Venezuela (Psuv), Diosdado Cabello, y el consejero del Departamento de Estado de EEUU, Thomas Shannon.
“Shannon viajará primero allí, y se reunirá con ellos otra vez, pero con una visión específica, con una agenda más completa que espero nos acercará a Delcy, a mí, y nos ayude a ir más allá de la vieja retórica”, agregó Kerry, al tiempo que aseguró que apoyará el proceso de diálogo emprendido por Caracas con la oposición con el acompañamiento de la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur) y tres expresidentes hispanos.
Sin embargo, momentos antes, en el seno de la OEA, Kerry pidió la realización de un referendo “justo y oportuno” para Venezuela, en relación al revocatorio que impulsa la oposición venezolana para revocar el mandato del presidente electo legítimamente en comicios libres, Nicolás Maduro, y cuyo proceso debe regirse por el reglamento del Consejo Nacional Electoral (CNE) venezolano.
Ante la situación, la canciller Rodríguez afirmó que “los asuntos internos de Venezuela los dirimen los venezolanos”, indicando que lo contrario significaría, además, una vulneración de la carta fundacional de la OEA, “que contempla la no intervención en los asuntos internos de los Estados como una piedra angular de esta organización”.
En ese contexto celebraron la reunión a puerta cerrada ambos cancilleres, dejando sin duda sorprendida a la comunidad internacional al apostar al diálogo bilateral y a una serie de encuentros, cuya agenda se conocerá luego de la visita de Shannon a Caracas en los próximos días.
A este respecto, el ex embajador de Venezuela ante la OEA, Roy Chaderton, dijo que “se produjeron buenas señales de ambos lados, de que es posible restablecer relaciones entre ambos países, siempre con base en el respeto mutuo y la soberanía de cada quien”.
Sin embargo, para el analista Jesús Ernesto Parra, EEUU está ganando tiempo con una “táctica de engaño” para cerrar el frente diplomático y agudizar el frente de conflicto interno y la deslegitimación de la figura presidencial.
“Con esta estrategia Washington buscará la ruptura de los pocos avances que ha habido en el ámbito de la reactivación económica, agudizando el bloqueo financiero y la posibilidad de Venezuela de acceder a financiamiento internacional”, dijo a Xinhua.
Asimismo, el ex embajador venezolano en Grecia, Franklin González, también en conversación con la agencia, consideró que el encuentro entre Rodríguez y Kerry “es positivo y ojalá pueda avanzar y no se quede en la diplomacia de micrófonos”.
Es necesario recordar que tras el último intento de restablecer relaciones, contrariamente a levantar las sanciones a funcionarios venezolanos y derogar la orden conocida como el “Decreto Obama”, EEUU amplió las sanciones que contemplaron congelamiento de activos y suspensión de visas; y además, en marzo de 2016 prorrogó por un año más dicho decreto.
Para el internacionalista Miguel Jaimes la reunión desmonta el discurso de la administración norteamericana de deslegitimación, al reconocer que en Venezuela hay un gobierno y lo preside Nicolás Maduro; “y reconoce al mismo tiempo a la canciller y sus palabras, que fueron claras y contundentes en el seno de la OEA”.
En un editorial publicado este miércoles por el diario The Washington Post, se puede leer: “(…) funcionarios de EEUU han favorecido un proceso de diálogo, patrocinado por España, Argentina y otras naciones, cuyo objetivo sería tranquilizar a los colaboradores de Maduro, que tendrían un lugar en un futuro si ceden el poder; de lo contrario lo que se avecina es una mezcla fea de violencia política y decadencia económica”.
En la historia contemporánea, EEUU ha calificado como “amenaza” a Irán, Birmania, Sudán, Rusia, Zimbabue, Siria, Bielorrusia y Corea del Norte; y haciendo uso de ese tipo de decretos atacó a Irak por invadir a Kuwait (1990), y a Afganistán a causa del control talibán de ese país (1999 y 2002).
También atacó a Liberia y a Sierra Leona (2001 y 2004) por supuesta violación a los Derechos Humanos; y a Libia (1986 y 2004) por ser calificado como patrocinante del “terrorismo”.
“El mayor logro de (Nicolás) Maduro ha sido el de mantener la paz y la estabilidad del país a pesar de las dificultades económicas, la coyuntura de crisis y la provocación desde varios flancos”, aseguró Jaimes a Xinhua.
El presidente Nicolás Maduro saludó el resultado de la reunión entre ambos diplomáticos y reiteró su deseo de iniciar el diálogo con EEUU con base en el “respeto de la soberanía y la autodeterminación de Venezuela”, pero dejó claro que “lo cortés no quita lo antimperialista”.
“Si es que yo tengo tres años proponiéndolo señor Obama. Yo saludo el diálogo, bienvenido sea y que cese la ‘conspiradera’ contra Venezuela. Estoy de acuerdo, aprobado, que se hagan esos contactos de alto nivel de manera acelerada”, dijo Maduro.
El mandatario instó a la administración de Washington a designar un embajador en Caracas y de ese modo “regularizar” las relaciones entre los dos países, al tiempo que llamó al gobierno norteamericano a cumplir con el principio de respeto mutuo y la no injerencia.
A consideración de Miguel Jaimes, Estados Unidos se sintió desenmascarado y va a detener, en buena medida, la agresión contra este país suramericano por parte de la OEA, que en el caso venezolano “se está desinflando”.
“Ante la OEA se puso en evidencia el abuso injerencista, la infiltración y la agenda de trabajo por parte de EEUU para socavar la estabilidad democrática de Venezuela; y en eso la canciller fue enfática en su discurso ante el organismo”, precisó el analista.
Según los analistas, con este periplo de encuentros insistir en la aplicación de la Carta Democrática Interamericana (CDI) contra Venezuela “no será fácil”, pero que Venezuela debe aprender de estas experiencias, porque “la OEA actúa como una corporación de EEUU que es el que pone la firma, y el organismo le permite sus ‘groserías imperiales’ con políticas de golpes suaves e intervenciones”.
Para Ernesto Parra EEUU buscará una agudización del conflicto venezolano, porque “no es extraño que justo en estos días estén apareciendo saqueos muy bien ejecutados y además en municipios que están bajo el control del partido Voluntad Popular (VP), que es la fuerza política de Leopoldo López”.
“Venezuela debe estar preparada y debe saber que internacionalmente tiene una política de sobrevivencia, ante esto debe estar en alerta permanente, defender su verdad, y convertir su cancillería en cabina de mando”, apuntó el analista.
En reiteradas oportunidades Venezuela ha invitado al gobierno de Barack Obama a avanzar hacia una relación bilateral con respeto a la soberanía y conforme a los principios y propósitos de la Carta de las Naciones Unidas (FIN).