El malandro de los Mendoza. Por Miguel A. Jaimes N.
Jueves, 13/06/2013 07:42 AM
Hasta para ser malandro hay que estudiar. Pero relacionar de malandros a los Mendoza, sería muy poco. Más bien los ubico como unos grandísimos delincuentes. Acaparadores, quienes juegan con las necesidades de la gente. Conocedores de todas las mañas en la especulación.
Expertos en el latrocinio y en los robos de los alimentos entre otras muchas cosas más. Son unos campeones escondiendo alimentos para generar zozobra en la población y así justificar sus desmedidos aumentos, más las compras nerviosas, diarias y ahora de costumbre en la población.
Vender más y a precios altos, esa es la estrategia. Quizás son los precios más elevados de la región de Suramérica. Han logrado que los productos faltantes en los anaqueles sean declarados de urgente necesidad por la desesperada población, quienes buscan en diarias peregrinaciones sus necesidades.
Pero aquí, hay que hacer urgentemente el mapa de la especulación. Ese es un llamado directamente al gobierno antes que la oposición junto a sus empresarios tomen la batuta y de culpables se conviertan en pobrecitos, como siempre han están acostumbrados a hacerlo.
Como poder entender que muchos productos falten solo en algunos estados del país. Cuando la venta, importación y producción más bien va en aumento. Las compras por parte de gobierno nacional y sus pagos se incrementan a diario, las importaciones no cesas, la producción no se detiene y las toneladas producidas van en aumento, pero falta la comida, definitivamente esto no se entiende.
Como puede ser posible que sólo en algunos estados, específicamente en los de la zona andina falte papel higiénico, azúcar, leche, arroz y muchos productos más. Pero esto, únicamente lo vemos en estas áreas geográficas.
Esto, primeramente lo hacen los Mendoza se hace para garantizar por parte de la población en los estados Táchira y Mérida el mantenimiento de un número importante de votos para la oposición.
Han visto en estas dos regiones de la zona andina la posibilidad de crear focos terribles de desestabilización, esto forma parte de una estrategia desestabilizadora. Veamos los resultados de las elecciones presidenciales de abril 2013.
